Con una superficie de 11,8 km cuadrados la anteiglesia de Zaldibar, en tiempos denominada Zaldua, forma parte de la Mancomunidad del Duranguesado, eso sí, en el límite de Bizkaia con Gipuzkoa. Limita al norte con Mallabia y Ermua, al sur con Elorrio, al este con Eibar y Elgeta y al oeste con Berriz. Es un punto de paso, un valle estrecho, a 7 km de Durango y a 9 de Eibar, con buenas comunicaciones (N-634, A-8), servicio de autobuses a Eibar, Durango y Ermua y estación en la línea de ferrocarril Bilbao-Donosti.
Zaldibar tiene 3.038 habitantes (2015) y una densidad de población aproximada de 257 hab/km2. Se trata de un municipio formado por un casco urbano que centraliza los servicios y comercios y varios núcleos de población dispersos en su territorio: Eitzaga, Sallabente, Olarreaga, Goierri, Aranguren y Gazaga. Se encuentra rodeado de montes, con numerosos ríos y arroyos y para ir en dirección a Gipuzkoa se debe acceder a través del puerto de Areitio y de los túneles que hay bajo este puerto.
Hay explotaciones agrícolas y ganaderas, entre las que destacan por ejemplo varios caseríos que cultivan plantas y árboles (arboricultura) con cada vez mayor reconocimiento y otros que están especializados en los productos de huerta que no sólo venden en la Mancomunidad del Duranguesado sino incluso en Bilbao. Sin embargo, su punto fuerte es la industria, sobre todo el sector de transformados metálicos (cuyas exportaciones están en crecimiento) como son los talleres de forja, estampaciones metálicas, máquina-herramienta (sectores muy fuertes en toda la mancomunidad), escopetas de caza, llaves ajustables, coches para niños, auxiliares de automoción, carpinterías, etc.
La Anteiglesia de Zaldibar posee un rico y amplio patrimonio histórico y artístico tanto religioso como civil. La iglesia parroquial de San Andrés data del S. XIII, aunque ha sido reconstruida posteriormente varias veces: porque se quedó pequeña y decidieron ampliarla o en 1766, por ejemplo, porque un rayo destruyó el presbiterio y obligó a modificar también el campanario. No obstante, destaca una escultura gótica de finales del S. XV tallada en piedra arenisca y en la que encontramos, en su parte central, la Cruz de San Andrés. A finales de noviembre se celebran las fiestas patronales de San Andrés.
Hay más cosas que visitar: el Monasterio de las Madres Carmelitas, la capilla del antiguo hospital que es de estilo neorromántico, seis ermitas que hay en los diferentes barrios de Zaldibar y el Calvario, del S. XVII, sito en el camino al barrio Goierri. Su visita es una estupenda excusa para realizar multitud de rutas que hay preparadas y que permitirán disfrutar del bello entorno que rodea al municipio totalmente.
En cuanto a la arquitectura civil destaca el ayuntamiento, aunque esté construido en 1972, y varias torres que fueron erigidas entre los siglos XV y XVII y que son de gran interés: Garitaonaindia, Zaldua y Eitzaga.
En su momento la Anteiglesia fue representada por un fiel en las Juntas Generales de Guerediaga que ocupaba el asiento nº 7. En aquella época había numerosos molinos que eran movidos por los abundantes arroyos de la zona y que a su vez bañaban una fértil vega llena de frutales. Los árboles siempre han sido una fuente extremadamente importante de riqueza en esta zona (castaños, hayas, robles, plátanos, abedules, etc.).
Destaca como uno de los momentos históricos que los pobladores de Zaldibar no olvidan el dominio secular de los dueños de la antigua Torre de Zaldivar. Según la tradición, don Sancho Abarca pasó diez años preso en el calabozo de esta Torre. Y de ese linaje proceden Juan y Vicente de Zaldivar, ambos maestres de Campo, allá por el S. XV, y cofundadores del colegio de la Compañía de Zacatecas. Además, fueron patronos de la iglesia de San Andrés otros dos miembros del linaje: Pedro Ruiz de Zaldivar y Fernando de Zaldivar.
BALNEARIO DE ZALDIBAR
Hay un importante manantial minero-medicinal, “urgazia”, llamado “de Zaldibar” (en realidad son cinco manantiales, algunos de muy diferentes características químicas) que dio origen a un establecimiento balneario y una hospedería, fundados en 1846, por don José María de Munibe y Aranguren, conde de Peñaflorida. Los inicios fueron modestos pero dado el éxito que estas aguas tenían en la curación o mejora de determinadas afecciones dermatológicas los herederos del fundador fueron ampliando y respondiendo a la creciente demanda. Fue una época dorada para los balnearios, la medicina no contaba con los recursos actuales, y la eficacia terapéutica atrajo a numerosos enfermos, de modo que en 1882 ya había un suntuoso Hotel del Parque y lo que era considerado, según los cánones de la época, como un magnífico departamento balneoterápico.
Los progresos en el campo de la medicina y los cambios en las costumbres y creencias fueron razones del declive de numerosos balnearios (Eskoriatza, Elorrio, Sta. Agueda por ejemplo, ¡hubo hasta doce balnearios en Bizkaia!) y en 1922 le tocó el turno al de Zaldibar. Fue a parar a manos de la Diputación de Bizkaia que lo destinó a Hospital Psiquiátrico, y desde 1985 pertenece a Osakidetza.
Más información en la web del ayuntamiento de Zaldibar
http://www.zaldibar.eus/ES-ES/AYUNTAMIENTO/Paginas/default.aspx
http://www.zaldibar.eus/es-ES/Turistas/Historia/Paginas/BalneariosdeZaldibar.aspx
http://www.eustat.eus/ci_ci/municipal/datos_estadisticos/zaldibar_c.html#axzz4DjxeE2lP
http://turismo.euskadi.eus/aa30-12375/es/contenidos/d_destinos_turisticos/0000011645_d2_rec_turismo/es_11645/11645-ficha2.html